Debe resultar muy difícil, a estas alturas, hacer un panegírico acerca de la vida política de Jaime Guzmán. ¿Por qué?, porque el accionar en el devenir político del fundador de la UDI e ideólogo de la dictadura derechista que sufrió nuestro país durante 17 años, es cointradictorio con los conceptos de Democracia, Justicia, Libertad y Pluralismo, que durante la dictadura fueron fueron aplastados por los opresores de entonces, en la cual Guzmán tuvo un rol determinante. El era un un abogado, que intentó darle justificación jurídica -aunque espuria- a la criminal dictadura.
Si bien, Guzmán (o el enano o flaco como le decían sus amigos) era un hombre incapaz de matar siquiera una mosca -por eso su renuncia al movimiento derechista Patria y Libertad-, su discurso envenenaba hasta a los más tolerantes y pacientes, de ahí que su presencia no solo provocaba el rechazo de la izquierda, sino también de la mayoría de los chilenos.
Después del golpe militar, Jaime Guzmán plasmó en la práctica lo que siempre había pensado y que tenía un claro tinte fascista: a los marxistas hay que aplicarle toda la energía posible, porque esto no se puede transformar en una dictablanda; con este ánimo llegaba al poder el autor de la constitución del 80. Pero él no midió las consecuencias que traería su frenético anticomunismo: la masacre más criminal en contra de compatriotas nuestros.
Primero fue asesor de Gustavo Leigh, posteriormente asesoró y se convirtió en el ideólogo de la Dictadura que junto a Pinochet y Manuel "Mamo" Contreras dieron vida al engendro político-represor más horroroso de la historia de Chile.
Guzmán que era profundamente católico, incluso tenía anotado los horarios de misa en las iglesias de todos los puntos de Santiago, también las emprendió contra la Iglesia, especialmente en contra del Cardenal Raúl Silva Henríquez. Este en una oportunidad lo amenazó con excomulgarlo si no moderaba su lenguaje agresivo e insidioso. Esto fue comentado por la Prensa de la época.
Jaime Guzmán creció en un ambiente político, sus ascendientes fueron connotados hombres públicos del devenir político nacional. Él a los cuatro años ya sabía leer, y a los quince demostraba una completa admiración por el dictador español Francisco Franco, hecho que coincidía con lo que pensaba Augusto Pinochet, lo que lo llevó a entenderse muy bien con el dictador chileno.
Este hombre flaco, con anteojos de gruesos vidrios por su miopía, que le gustaba el fútbol y debido a esto hizo un curso para ser árbitro de este deporte, que tenía mucha habilidad verbal aunque no atractivo para panelista de programa de debate en televisión (según Jaime Celedón al justificar su reticencia para incluirlo en el programa "A esta hora se improvisa", pero que a la larga resultó todo lo contrario por las pasiones que despertaba este hombre en los políticos)... no se le conoció ninguna "polola", novia, amante, ni nada relacionado con los placeres del sexo femenino.
A mí lo que realmente me gustaba de Jaime Guzmán, era su hermana Rosario; ésta era una periodista con un fascinante y sensual atractivo que a mí siempre me cautivó.
Si resulta difícil hacer una apología de la obra de Jaime Guzmán, también es inútil los esfuerzos de sus seguidores por levantarle un memorial con el fin de inventarle una nueva imagen al autor intelectual de la Dictadura. Guzmán fue el fundador de la UDI, en este contexto este partido no puede tener como fundador a un hombre que estuvo tan asociado con las tropelías y aberraciones de la Dictadura; por lo tanto, se hace necesario inventarle una nueva imagen que lo aleje del horror del que fue partícipe fundamental. De ahí el enojo por la negativa de la Presidenta a asistir a esta maniobra de marketing político en memoria del ideólogo de la Dictadura. Sólo lo pretenden mostrar como el senador asesinado en democracia, pero no como el hombre que asesoró al dictador y que dejó una estela de inmenso dolor en muchos compatriotas.
A propósito de este memorial, el día 10 de Noviembre escuchaba por radio Cooperativa un programa de conversación en que la destacada periodista Mónica González hacía alusión a un episodio bastante canallesco y oscuro respecto de la actitud que tuvo Jaime Guzmán en el caso del ejecutado político Eugenio Ruiz Tagle.
Eugenio Ruiz Tagle fue una de las víctimas ejecutadas en Calama por "La Caravana de la Muerte". El era gerente de Inacesa en Antofagasta hasta el golpe militar del 73. Fue asesinado brutalmente con un corvo; Así lo recuerda el "Rorro":
El 21 de octubre, la madre de Ruiz Tagle Orrego vio el cadáver de su
hijo en el ataúd: "Le faltaba un ojo, el izquierdo. Los párpados estaban
hinchados, pero no tenía heridas ni tajos. Se lo sacaron con algo, a
sangre fría. Tenía la nariz quebrada, con tajos, hinchada y separada
abajo, hasta el fin de una aleta. Tenía la mandíbula inferior quebrada
en varias partes. La boca era una masa tumefacta, herida, no se
veían dientes (...) Su cabeza estaba en un ángulo muy raro, por lo que
creí que tenía el cuello quebrado".
El coronel (r) Sergio Arredondo, usaba la chapa de "Rorro". Es identificado por los organismos de derechos humanos
como el segundo hombre de Arellano Stark en la denominada
Caravana de la Muerte.
Pinochet en ese entonces ordenó que se dijera que Ruiz Tagle nunca fue torturado.
Jaime Guzmán supo de este crimen con lujo de detalles, pero nunca dijo nada de este cobarde asesinato.
La periodista, directora de CiperChile, Mónica González, que ha investigado con mucha laboriosidad y profundidad el tema de las violaciones a los derechos humanos en Chile, sostuvo en el programa radial que Jaime Guzmán conoció todos los antecedentes del sufrimiento cruel y cobarde a que fue sometido Eugenio Ruiz Tagle cuando fue ejecutado en Calama por la temida Caravana de la Muerte.
Cómo calificar a este hombre de fuerte formación católica que fue sobrepasado por su fanatismo y anticomunismo hasta el punto de soslayar los horrores de muchos chilenos masacrados ante sus propios ojos.
¿Cómo un hombre de esa calaña puede ser merecedor de un memorial en el que se tuvo la desubicación de invitar a la Presidenta?
Cualquier persona tiene pleno derecho a resaltar a un personaje, pero puede resultar chocante y antiético recurrir a personas que marcaron a millones de chilenos y dejaron una estela dolorosa difícil de superar.
Jaime Guzmán podría haber pasado a la Historia con otro estatus si sus valores cristianos hubiesen sido más fuertes que su agresividad anticomunista, de haber sido así habría detenido la masacre, ya que él era el más influyente y determinante ideólogo del régimen.
No comparto el asesinato de él, porque considero que la venganza no era el camino, sino la Justicia: la positiva, la histórica y la que se debe rendir ante el Todopoderoso.
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Si bien, Guzmán (o el enano o flaco como le decían sus amigos) era un hombre incapaz de matar siquiera una mosca -por eso su renuncia al movimiento derechista Patria y Libertad-, su discurso envenenaba hasta a los más tolerantes y pacientes, de ahí que su presencia no solo provocaba el rechazo de la izquierda, sino también de la mayoría de los chilenos.
Después del golpe militar, Jaime Guzmán plasmó en la práctica lo que siempre había pensado y que tenía un claro tinte fascista: a los marxistas hay que aplicarle toda la energía posible, porque esto no se puede transformar en una dictablanda; con este ánimo llegaba al poder el autor de la constitución del 80. Pero él no midió las consecuencias que traería su frenético anticomunismo: la masacre más criminal en contra de compatriotas nuestros.
Primero fue asesor de Gustavo Leigh, posteriormente asesoró y se convirtió en el ideólogo de la Dictadura que junto a Pinochet y Manuel "Mamo" Contreras dieron vida al engendro político-represor más horroroso de la historia de Chile.
Guzmán que era profundamente católico, incluso tenía anotado los horarios de misa en las iglesias de todos los puntos de Santiago, también las emprendió contra la Iglesia, especialmente en contra del Cardenal Raúl Silva Henríquez. Este en una oportunidad lo amenazó con excomulgarlo si no moderaba su lenguaje agresivo e insidioso. Esto fue comentado por la Prensa de la época.
Jaime Guzmán creció en un ambiente político, sus ascendientes fueron connotados hombres públicos del devenir político nacional. Él a los cuatro años ya sabía leer, y a los quince demostraba una completa admiración por el dictador español Francisco Franco, hecho que coincidía con lo que pensaba Augusto Pinochet, lo que lo llevó a entenderse muy bien con el dictador chileno.
Este hombre flaco, con anteojos de gruesos vidrios por su miopía, que le gustaba el fútbol y debido a esto hizo un curso para ser árbitro de este deporte, que tenía mucha habilidad verbal aunque no atractivo para panelista de programa de debate en televisión (según Jaime Celedón al justificar su reticencia para incluirlo en el programa "A esta hora se improvisa", pero que a la larga resultó todo lo contrario por las pasiones que despertaba este hombre en los políticos)... no se le conoció ninguna "polola", novia, amante, ni nada relacionado con los placeres del sexo femenino.
A mí lo que realmente me gustaba de Jaime Guzmán, era su hermana Rosario; ésta era una periodista con un fascinante y sensual atractivo que a mí siempre me cautivó.
Si resulta difícil hacer una apología de la obra de Jaime Guzmán, también es inútil los esfuerzos de sus seguidores por levantarle un memorial con el fin de inventarle una nueva imagen al autor intelectual de la Dictadura. Guzmán fue el fundador de la UDI, en este contexto este partido no puede tener como fundador a un hombre que estuvo tan asociado con las tropelías y aberraciones de la Dictadura; por lo tanto, se hace necesario inventarle una nueva imagen que lo aleje del horror del que fue partícipe fundamental. De ahí el enojo por la negativa de la Presidenta a asistir a esta maniobra de marketing político en memoria del ideólogo de la Dictadura. Sólo lo pretenden mostrar como el senador asesinado en democracia, pero no como el hombre que asesoró al dictador y que dejó una estela de inmenso dolor en muchos compatriotas.
A propósito de este memorial, el día 10 de Noviembre escuchaba por radio Cooperativa un programa de conversación en que la destacada periodista Mónica González hacía alusión a un episodio bastante canallesco y oscuro respecto de la actitud que tuvo Jaime Guzmán en el caso del ejecutado político Eugenio Ruiz Tagle.
Eugenio Ruiz Tagle fue una de las víctimas ejecutadas en Calama por "La Caravana de la Muerte". El era gerente de Inacesa en Antofagasta hasta el golpe militar del 73. Fue asesinado brutalmente con un corvo; Así lo recuerda el "Rorro":
El 21 de octubre, la madre de Ruiz Tagle Orrego vio el cadáver de su
hijo en el ataúd: "Le faltaba un ojo, el izquierdo. Los párpados estaban
hinchados, pero no tenía heridas ni tajos. Se lo sacaron con algo, a
sangre fría. Tenía la nariz quebrada, con tajos, hinchada y separada
abajo, hasta el fin de una aleta. Tenía la mandíbula inferior quebrada
en varias partes. La boca era una masa tumefacta, herida, no se
veían dientes (...) Su cabeza estaba en un ángulo muy raro, por lo que
creí que tenía el cuello quebrado".
El coronel (r) Sergio Arredondo, usaba la chapa de "Rorro". Es identificado por los organismos de derechos humanos
como el segundo hombre de Arellano Stark en la denominada
Caravana de la Muerte.
Pinochet en ese entonces ordenó que se dijera que Ruiz Tagle nunca fue torturado.
Jaime Guzmán supo de este crimen con lujo de detalles, pero nunca dijo nada de este cobarde asesinato.
La periodista, directora de CiperChile, Mónica González, que ha investigado con mucha laboriosidad y profundidad el tema de las violaciones a los derechos humanos en Chile, sostuvo en el programa radial que Jaime Guzmán conoció todos los antecedentes del sufrimiento cruel y cobarde a que fue sometido Eugenio Ruiz Tagle cuando fue ejecutado en Calama por la temida Caravana de la Muerte.
Cómo calificar a este hombre de fuerte formación católica que fue sobrepasado por su fanatismo y anticomunismo hasta el punto de soslayar los horrores de muchos chilenos masacrados ante sus propios ojos.
¿Cómo un hombre de esa calaña puede ser merecedor de un memorial en el que se tuvo la desubicación de invitar a la Presidenta?
Cualquier persona tiene pleno derecho a resaltar a un personaje, pero puede resultar chocante y antiético recurrir a personas que marcaron a millones de chilenos y dejaron una estela dolorosa difícil de superar.
Jaime Guzmán podría haber pasado a la Historia con otro estatus si sus valores cristianos hubiesen sido más fuertes que su agresividad anticomunista, de haber sido así habría detenido la masacre, ya que él era el más influyente y determinante ideólogo del régimen.
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Comentarios
suerte en tu triste pasado.
Si leyeras los artículos de mi blog, te daría vergüenza el comentario que hiciste.
Si eres joven deberías de todas forma interesarte en la política, pero con respeto.
Gracias por leer mi artículo... te deso suerte y éxito en todom los ámbitos.
Mi nombre es Hernán Fuentes y tengo 61 años de edad. Viví todo el período anterior a la llegada de la U.P. al poder y estudié en la Universidad Católica durante tres años (1965-1968) Creo que a su artículo le falta objetividad y balance. Ud. hace abstracción del contexto político en que le tocó vivir a don Jaime Guzmán E. Eran tiempos en que el marxismo se creía poseedor de la Historia y de la Verdad. Estaba dispuesto a arrasar con todo con tal de imponer su mesiánica visión de la sociedad y del poder político. Eran los tiempos del Che Guevara, de Fidel Castro, del triunfo de la revolución cubana. Se menospreciaba nuestra democracia, tildándola de "burguesa" y se alababa a la recién formada "democracia popular" cubana. Se forma el MIR en Concepción, en 1965, que justificaba y preconizaba la toma violenta del poder por el proletariado y el campesinado. En fin, eran tiempos caóticos en los cuales se encendió una luz de esperanza y de salida de la desesperada situación en que se encontraba la sociedad chilena. Esa luz se llamó Jaime Guzmán Errázuriz. El fue nuestro líder espiritual y político que marcó toda una época.
Don Osvaldo, quisiera hacerle una consulta: ¿Ud. es partidario de establecer un régimen comunista en Chile? ¿No le dice nada lo que han padecido otros países que han sufrido el sistema comunista y que no desean por nada del mundo volver a él? Gracias por su atención. Felices Pascuas y un Próspero Año Nuevo 2009.