
En el año en curso la pérdida de clases por los paros de los profesores alcanza al día de hoy los 29 días. La generación que sale este año de los liceos acumula un trimestre de clases perdidas a raíz de movilizaciones como la "revolución pingüina" y paros de los docentes. Son cerca de 100.000 alumnos que saldrán de cuarto medio este año del sistema municipal en una abismante desventaja, no sólo en relación a los colegios particulares, sino también a los particulares subvencionados que no han tenido que sufrir pérdidas de clases como lo ha tenido la educación más pobre. Un día que se pierda clases, puede hacer la diferencia entre los alumnos.
En este año 2009 el desglose de los paros de los profesores es el siguiente:
- 16 días de paro por el bono SAE
- 1 día de paro de advertencia
- 12 días de paro hata hoy por la deuda histórica.
Pero realmente porqué ocurren estos paros... ocurre no porque no exista un reconocimiento de la deuda histórica por parte del Estado, sino porque a las partes involucradas, es decir, el ejecutivo, los ministros, los parlamentarios, los propios profesores y los que de cierta manera poseen el comando político-gubernamental no tienen matriculados a sus hijos en los colegios municipalizados. Jamás hubiese ocurrido este paro de profesores con características intransigentes de ambas partes (gobierno y profesores) si sus hijos estuviesen matriculados en estos establecimientos municipalizados que están siendo afectados. Tampoco se hubiese dejado crecer este monstruo que ahora es la educación: una industria, en la cual, el que tiene la billetera más grande es el que puede comprar más y mejor educación.
Por eso que gobierno y profesores demuestran intransigencia, pues sus hijos no son los que van a "cagar". Ellos apuestan a que el perfil de los padres de los alumnos de los establecimientos municipalizados en su mayoría no "están ni ahí" con la educación o no tienen real conciencia del daño y la pésima educación que reciben sus hijos, es más, saben los tremendos problemas de violencia, drogadicción, alcoholismo, delincuencia, desempleo, desintegración familiar y desesperanza que tienen la mayoría de las familias que tienen a sus hijos en el sistema municipalizado de educación. Y piensan... estos no van a reclamar y tampoco saben como hacerlo, entonces seamos intransigentes a ultranza. No hay una verdadera preocupación porque no están siendo afectados, sino los demás, los más pobres. Pero también hay padres que están angustiados por toda esta educación, y de ahí que se esté generando un rechazo a estos continuos paros.
El gobierno se escuda en que jurídicamente la deuda no existe, probablemente sea así; pero no se puede desconocer que hay una deuda moral con el profesorado. El traspaso de los docentes al sistema municipalizado los hizo perder beneficios, lo que en realidad no corresponde. Además, los profesores en dictadura, perdieron un 75% de sus remuneraciones, que es una más de las "cagaitas" de la dictadura. Si bien durante los gobiernos de la Concertación se han mejorado los sueldos a los docentes, igual se esperaría una mejor remuneración para los maestros en la actualidad.
Desde el punto de vista de trabajador entiendo a los profesores, porque ellos tienen empleador, y en Chile, la única forma efectiva que el trabajador consiga mejoras salariales y de trabajo es recurriendo a medidas extremas de presión, no hay otra forma en este país que no se caracteriza por la honestidad y asertividad en materias de relaciones laborales. Cuando el empleador, que en este caso podría ser el gobierno, llama al diálogo, con toda seguridad se deben estar apretando la guata de la risa si es que los profesores ceden a ese "diálogo". Se ha transformado en condición sinne qua non la presión extrema para lograr un verdadero diálogo y conseguir justos derechos y mejoras salariales en el mundo laboral. Es un error de los que tienen el comando empresarial o patronal, pero así están las cosas.
El gobierno debe haber apostado que los profesores no se iban a ir a paro, porque está próximo a finalizar el año escolar y quizás porque una de las profesiones en que la ética está muy presente, es en la de los profesores. Pero la ilusión de éstos, pues el tema se había llevado al congreso para discutir sus posibles soluciones y poner fin a la llamada deuda histórica, estaba muy cerca de materializarse, hasta que del gobierno surge la fría e intransigente voz de desconocer la deuda con los "profes". Es obvio que iba a provocar ira en los maestros, y creo que en cualquiera que le hubiese ocurrido una situación parecida.
¡Ah! Ojalá se vaya la actual Ministra de Educación. Si hasta la cara de "momia" tiene. Y el Ministro de Hacienda, Andrés Velasco, que ha sido un eficiente ministro, debiera flexibilizar su actitud. Si sus hijos estuviesen matriculados en establecimiento municipalizado, ya lo habría hecho y este paro hubiese durado muy poco.
Si no hay solución, es mejor que quede la "cagá" de un golpe; y disculpen por usar ese término varias veces, pero no hay otra forma de reflejar lo que pasa en educación.
Fíjense ustedes, educación y salud, son los temas que los chilenos le critican más al gobierno, a pesar del gran apoyo que tiene de los mismos. Los otros son delincuencia y corrupción, pero con la salvedad que estos temas son los que "fogonean" desde la derecha a través de los medios de comunicación controlados por este mismo sector político. Pero lo que existe en educación y salud es una realidad evidente, en que los gobiernos de la Concertación no han hecho los cambios que los chilenos piden a gritos.
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